Hay personas afortunadas que tienen la suerte (aunque a priori parezca una desgracia) de nacer dos veces.
Generalmente, cuando esto ocurre, se vive de otra manera. Porque se suele tomar conciencia de las pequeñas cosas de la vida, a las que antes de la debacle, no se les solía prestar atención.
Y es entonces cuando se aprende que lo que verdaderamente hace grande a la vida son, precisamente, estas pequeñas cosas. Por eso se suele comentar que, cuando te sucede una revolución de esas que lo trastocan todo, uno acaba por tener dos vidas: la que vivió antes y la que le queda por vivir después.
Este blog ha nacido dos veces.
Esta es la primera entrada de su segunda vida.
La primera la ha vivido en las redes sociales, más concretamente, en Facebook, con el nombre «Todo lo que aprendí de la nada». Much@s de vosotr@s ya me conocéis por este motivo. Han sido dos años de disfrute personal, de aprendizaje a través de la escritura, de encadenar letras, ideas y sentimientos que espero haber conseguido transmitir.
No ha sido ningún evento traumático lo que me ha llevado a empezar a escribir aquí. Más bien, la necesidad de evolucionar, de crecer, en definitiva, de eso que todos los seres humanos llevamos dentro: el querer superarnos día tras día.
Cambia el nombre, pero la esencia del mismo permanece. Porque estoy absolutamente convencida de que son esos momentos en la vida en los que parece que te quedas sin nada, los que más te pueden enseñar. Yo, por desgracia (o por suerte), al igual que tod@s, los he vivido, y a partir de ahí he comenzado a ser otra persona: alguien mejor, más ecuánime, más estable. Y me encanta compartir con todo aquel que tenga a bien leerme, lo que la nada me enseñó. Pero los que ya me conocéis sabéis que no sólo escribo mis ideas u opiniones; también me gusta compartir mis pequeñas creaciones en forma de poemas o relatos. Mis fragmentos de locura que apaciguan minutos. Usar las palabras como catarsis del alma.
Por eso, la palabra que mejor define a mi blog es esta: eclecticismo.
Espero que os guste tanto leerlo como a mí escribirlo. Espero que su segunda vida sea aún más plena que la primera.
¡Suerte!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Te felicito por tu blog
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias 🙂
Me gustaMe gusta